30.5.08

Manda huevos!

Hong Kong. ¿Sería posible vivir así las 24 horas del día? Los seres humanos no entendemos o mejor dicho, no queremos darnos cuenta de lo frágil que está la salud del planeta. Sólo hay que ver cómo Hong Kong vive aterrorizada, a diario, y no por un monstruo de los que suelen crear para animar las pantallas de televisión. Agárrense que por encima de la cabeza pueden pasar muchas cosas. El día que caiga uno se darán cuenta de los errores cometidos. Mientras tanto, los bolsillos a rebosar y las panzas llenas.

22.5.08

Rudolf Hess

La mano derecha de Adolf no está viva, pero casi. Y digo casi porque el juicio de Nuremberg colea aún entre jóvenes que, ni por asomo, se imaginan lo que vivió el pueblo de Israel y muchos millones de polacos que no cantaban "ey polaco el que no vote eh", sino que cantaban "de hoy no paso eh". Por primera vez, desde la caída del nazismo, alguien ha podido enviar un sello con la frívola imagen del que aparece a la derecha. El servicio postal de un país acostumbrado a pisar el acelerador, ha fabricado, a petición de un sanguinario, una tira de sellos con la imagen "hessis". Lo increíble del asunto es que el paquete ha llegado a destino. Las preguntas son, ¿se está preparando la tercera? ¿O todo terminó en el 45 y sólo es un estúpido ignorante de historia?

15.5.08

Una gran noticia...

Sí, reconozco que me quedé estupefacto cuando la leí. Todos conocen al señor George W. Bush, a ese forajido que país que no le gusta país que torpedea hasta saciarse. Bueno, vamos allá. Hace poco estuvo con su Santidad. Besitos y de todas esas cositas que se hacen en la intimidad de los más altos altares. Sin embargo, la noticia que me ha dejado con las manos temblorosas, sudorosas y un poquito atrofiadas es la de la boda de su hija menor. "Un tornado estuvo a punto de cancelar el enlace matrimonial de la familia presidencial de EE UU". Varios medios de comunicación, en sus páginas internacionales, colocaron ese titular antes que el del terremoto de China. Pero todo tiene explicación: los chinos son millones y Jenna Bush sólo hay una. Olé lo salao que son los editores. No obstante, el subtítulo de la new también era clave, era de interés público mundial: "la primera dama rompió su silencio y confesó que les hizo temer por la boda". Os voy a dar la explicación del por qué un hombre con cargo responsable y sin tarjeta joven de descuentos, optó por declarar a este tema más trascendental que el otro. Podía ser viernes y le había llegado información secreta acerca de que el evento se celebraba en el racho de los Bush; temor por el valor añadido del apellido Hager (Henry es el hombre que pasó la primera noche de bodas con Jenna y tiene muchos rascacielos); saber que la cena había tenido ensayo previo; que 200 personas de las más ilustres estaban invitadas; que había flores silvestres y que estaban los hermanos de George y los primos de Barbara. Sí, sí todo lo que ustedes quieran. Lo cierto es que colocó esa noticia porque la gente lo que quiere leer es farándula. ¿Cuál era el programa de Tele5 con más audiencia hace tres años? El Tomate. Ahí está la repuesta.

12.5.08

HIJOS DE PUTA



Cuando uno crea un blog, lo suele hacer para abordar un tema que le resulta interesante compartir con los demás. Sin embargo, esta vez mi cometido es denunciar un atropello tan salvaje como el que van a ver. Este vídeo que acompaña a este pequeño relato muestra cómo algunos desgraciados, y no voy a calificar más porque no pararía de insultarlos, despellejan a un pobre e indefenso animal. Tras arrancarle la piel a tiras, porque así posee más propiedades, no los rematan, sino que los dejan que mueran desangrados. Unos verdaderos hijos de puta los que están detrás de esa barbarie (LAS IMÁGENES SON MUY FUERTES).
Pledge to go fur-free at PETA.org.

7.5.08

Mi primera vez con Chávez

Le tenía ganas a este artículo, aunque por una u otra razón nunca había llegado a plasmarlo ni en papel ni en Internet, sino que se quedó en mojado, a la espera de ser retomado por esta fatigada plumilla. Mi primer y único encuentro con el mandatario venezolano Hugo Chávez, se remonta a 2004. En Uruguay, a la 01:00 horas, tras salir de fiesta por la Ciudad Vieja, volvía al coche de mi gran amigo y hermano Yaco. En el hotel Victoria Plaza, que estaba atestado de gorilas enfundados en trajes militares, se había concentrado una gran cantidad de morochos que esperaba, con un mutismo absoluto, a "un desconocido", tal y como me respondieron ante mi gran enfermedad: el cotilleo. Por curiosidad, y también por los nueve cubatas que llevaba en la sangre, incidí en mi pregunta. Necesitaba saber si el payaso Fofito o algún otro gran artista estaba a punto de asomar la cabeza y salir del anonimato. La respuesta fue toda una sorpresa mayúscula. Estaban esperando al líder más bocazas de América Latina. Y yo, debajo de la estatua de Artigas, con unos ojos enrojecidos y ultravenosos, disponía de mi gran oportunidad que no era otra que gritarle a los cuatro vientos: Pizarro bolivariano. Cuando una caravana de coches se postró en la puerta del hotel, del más reluciente vehículo oficial salió quien dice que Venezuela cuenta con el índice de felicidad más alto de Sudamerica. Buscando comparar a Chávez con Simón Bolívar, la figura más destacada de la emancipación americana frente al imperio español, comencé a gritar "Viva la república Bolivariana". En ese preciso instante, el hombre del pueblo que ha llevado al ostracismo a millones de sus compatriotas, alzó el brazo en un gesto de clara victoria y se metió, sin saber dónde se hallaba, en un recinto que suele acoger a la masa adinerada que aterriza en el país más cálido de los que he conocido. Sin más, me fui al coche con una sonrisa de oreja a oreja, masticando un chicle con aire de grandeza. ¿Por qué? Porque sólo dos personas, mi fiel compañero y el que escribe, estaban en ese lugar. Ni un medio de comunicación se hizo eco de aquella visita institucional, demostrándose, por lo tanto, la Ley de Murphy: a nadie le importa Chávez. Poseyendo varios canales de televisión como "Aló presidente", -un círco mediático por donde se lo mire-, este dictador no logró atraer a más gente que a sus tres secuaces de turno. Sin embargo, sí capté un dato importante... que la mayoría del dinero estatal de Venezuela estaba invertido en armas, ya que todos los presentes, y digo todos, portaban consigo un par de metralletas. ¿De quién quería protegerse Chávez en la nación más segura y pacífica del mundo? La respuesta está clara, de él mismo y de su gran ego.

4.5.08

"Guerras sucias"

A esta altura de la vida y tras recibir millones de mensajes en televisión, todos conocemos a Hillary Clinton y a Barack Obama. Decir algo nuevo es difícil... está todo dicho, aunque el propósito de este comentario es soltar alguna que otra perla de estas dos joyitas que se juegan el sillón de los demócratas. Clinton, la semana pasada, dejó caer de su boca un as que quería reproducir en estas líneas. "Borraría del mapa a Irán si llegara a lanzar un ataque nuclear contra Israel", afirmó. Después de dicha frase, que denota una inteligencia de mosquito, la mujer a la que le enseñaron a hacer felaciones a través de una becaria, reiteró, en una entrevista a la ABC News, que no se arrepentía de lo que había cantado a los cuatro vientos. Ganar votos, una obsesión que tiene marcada entre ceja y ceja desde que nació, le ha llevado a esta delicada mujer, de armas tomar, a buscar cualquier baza para ser la próxima presidenta de los EE UU. Sin embargo, en el país de las hamburguesas Kamikazes, todos los políticos se aferran al legado de Bush. Todos menos uno, el negro del basket. Aquel hombre que por ser de un color atípico para gobernar se quedara a las puertas de la Casa Blanca. Y es que hoy en día, en los tiempos de las "guerras sucias", lo importante para la sociedad norteamericana no es otra cosa que garantizar acción en el planeta. Es para preguntarse qué beneficios tienen estas "guerras sucias". El cine saca provecho, las aerolíneas también y, por supuesto, la comida basura, ya que ahora en las cajitas de la MC regalan juguetes fabricados en oriente medio. Este círculo vicioso, protegido por armas que amputan almas, tiene su punto álgido en las palabras de Clinton, cuyo primer objetivo si sale electa, por ahora es senadora, será impedir que Irán desarrolle armas nucleares. Si esta es la meta de la potencia mundial, ¿cuál será la de los países que la siguen? Ah, a modo de memoria histórica... ¿Le habrá llevado a tomar esta postura las sentadillas de Lewinsky y las comidas de... que le hacía a su esposo?

1.5.08

Historias de Uruguay...


Diez años atrás nunca hubiera imaginado que podría hablar de Uruguay, un alertargado país pero con grandes corazones, de la forma en la que l0 voy a describir. Cuando llegué a la República del publicitario Artigas, me hallé con dos sociedades que intentaban, a ciegas, ir hacia un punto convergente: la clase media. Sin embargo, entre mate y mate, y entre termo y termo, los políticos de ese estado "futbolín" se tomaban la justicia con el fin de abocar a su gente al abismo. Izquierda y Derecha eran lo mismo, iban fundidas de una mano que era la que entraba en el cajón para después salir con millones de dólares metidos en chimichurri. Mientras el peso se devaluaba, arrugaba u atrofiaba, seguía yendo a comer asaditos a casas de mis amigos que, por suerte, tenían qué meterse al cuerpo. Pero lo mejor, en un lugar atlántico, de mar y río del color de la plata, de veleros sin motor y paredes grises, era una rambla bien cuidada por su preciado valor sentimental. Allí, en un lugar de viento y sin sombras, pasé uno de los mejores momentos de mi vida, donde, por una u otra circunstancia me recordaba a mi España, a la España de los "gallegos" brutos o trabajadores (saquen conclusiones). En ese brazo kilométrico de rambla, sin puestos de chiringuitos ni comercios, poco explotada por un violador llamado capitalismo, pude contemplar cómo pica el sol del cono sur. De mi última vez me quedo, con aquella que me deparó mi futuro, con aquella que me hizo saber que Uruguay era más grande de lo que aparentaba ser un país de 3 millones y pico de personas. En aquel sitio, en una de sus esquinas "cojas", que dividen la pobreza de la riqueza, me bebí mi última chicha uruguya. Un rubia llamada"Pilsen", no penséis mal...era una cerveza, me hizo entender lo que ahora me pregunto. Después de venir de trabajar, estar sediento como un lagarto, tomar ese liquido de oro, es como acostarse sabiendo que te vas a levantar en una playa virgen rodeado de la persona que amas con solo pronunciar su nombre.