1.5.08

Historias de Uruguay...


Diez años atrás nunca hubiera imaginado que podría hablar de Uruguay, un alertargado país pero con grandes corazones, de la forma en la que l0 voy a describir. Cuando llegué a la República del publicitario Artigas, me hallé con dos sociedades que intentaban, a ciegas, ir hacia un punto convergente: la clase media. Sin embargo, entre mate y mate, y entre termo y termo, los políticos de ese estado "futbolín" se tomaban la justicia con el fin de abocar a su gente al abismo. Izquierda y Derecha eran lo mismo, iban fundidas de una mano que era la que entraba en el cajón para después salir con millones de dólares metidos en chimichurri. Mientras el peso se devaluaba, arrugaba u atrofiaba, seguía yendo a comer asaditos a casas de mis amigos que, por suerte, tenían qué meterse al cuerpo. Pero lo mejor, en un lugar atlántico, de mar y río del color de la plata, de veleros sin motor y paredes grises, era una rambla bien cuidada por su preciado valor sentimental. Allí, en un lugar de viento y sin sombras, pasé uno de los mejores momentos de mi vida, donde, por una u otra circunstancia me recordaba a mi España, a la España de los "gallegos" brutos o trabajadores (saquen conclusiones). En ese brazo kilométrico de rambla, sin puestos de chiringuitos ni comercios, poco explotada por un violador llamado capitalismo, pude contemplar cómo pica el sol del cono sur. De mi última vez me quedo, con aquella que me deparó mi futuro, con aquella que me hizo saber que Uruguay era más grande de lo que aparentaba ser un país de 3 millones y pico de personas. En aquel sitio, en una de sus esquinas "cojas", que dividen la pobreza de la riqueza, me bebí mi última chicha uruguya. Un rubia llamada"Pilsen", no penséis mal...era una cerveza, me hizo entender lo que ahora me pregunto. Después de venir de trabajar, estar sediento como un lagarto, tomar ese liquido de oro, es como acostarse sabiendo que te vas a levantar en una playa virgen rodeado de la persona que amas con solo pronunciar su nombre.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Que bueno es tener memoria pichica...
Desde la cuna de tu enfermedad lo único que me queda decir es: ¡¡¡salú hermano!!!

Anónimo dijo...

muy bien, la proxima tienes q hablar de la gente linda de Uy

Anónimo dijo...

Creo que mucho más importante que juzgar a un país por su pasado es informarse sobre su presente y aún mejor sobre su futuro (que por suerte parece prometedor)
Mi nombre es Verónica, soy Argentina y vivo en Uruguay desde chiquita...desde que tengo memoria. He visto momentos duros de ambos países...pero déjenme contarles lo hermoso que es nuestro "paisito", sumándome a al comentario de "chiop".
La gente uruguaya es muy solidaria, por sobre todas las cosas. Su mayor defecto es hacer honor a todo tiempo pasado, convencido que fue mejor, hasta el punto de tener una "noche de la nostalgia", donde el país entero se moviliza para bailar y rendir tributo a las décadas de oro.
En los últimos años Uruguay ha tenido un cambio muy favorable...no deja de sorprenderme, cuando salgo los fines de semana por la noche y veo tanta gente paseando en familia, parejas jóvenes, adultos...gente de la clase media, que como dice Juanra pasaron momentos muy difíciles, pero hoy por hoy pueden darse el "lujo" de salir al cine o a cenar en familia después de "romperse" trabajando. Parece que por fin, después de tanto tiempo, en Uruguay los trabajadores reciben su recompensa por tanto esfuerzo, y tienen definitivamente no solo qué meterse al cuerpo sino las herramientas necesarias, para alimentar, educar y compartir momentos en familia con sus hijos.
¿Qué no hay hambre en todo el mundo?
Además, Uruguay no es solo Montevideo y sus calles grises...tiene unos lugares sensacionales en el resto de sus 18 departamentos, con hermosas vistas y playas. Los últimos veranos de Punta del Este o Rocha, por ejemplo, sacan a la luz la prueba del enriquecimiento que está teniendo nuestro país, en este caso, gracias al turismo. Gracias a europeos y personas de todo el mundo que elige como destino un país tan chiquito pero tan confortable.

Si, no somos primer mundo, eso es cierto, pero estoy muy orgullosa de mi país...me da mucha tristeza Juanra que no te hayas llevado de aquí nada más importante que lo que deja entrever tu comentario; estaba convencida que tenías cosas muy valiosas para hablar de la gente de por aquí.
De todas formas, estoy convencida que la felicidad no está en los paises más ricos sino donde uno se proponga encontrarla.

Adrián Singer dijo...

Verónica: no te conozco, pero me tomo el atrevimiento de hacerte un comentario. Tu comentario tiene el tufillo del uruguayocéntrico que no vio mucho mundo. Yo soy uruguayo y vivo en el exterior, y te digo que cuando uno sale, uno se acuerda de las cosas que Juanra rememora. Son las cosas lindas del país (¡me duele tanto la ausencia de la Pilsen!), sin olvidarse de la pobreza. Cuando Juanra habla de una rambla no explotada, lo entiendo. Hay que ver cómo el hambre comercial se come lugares, y sin embargo Uruguay se mantiene (en parte, por suerte) tan limpito... Claro que quien está dentro de la "burbuja" se pone con politiquerías (sin ánimo de ofender) y está en la cosa interna, tratando de defender que el gobierno de izquierda te permite darte el lujo de salir a comer. De nuevo: hay que abrir la cabeza, el mundo ofrece mucho más. Y te lo dice alguien que disfrutaba (y espero volver a hacerlo) del Cabo, alguien que está muy, muy, muy lejos del yupismo. Pero hacer culto del criollismo, me parece la actitud más ombliguista y retrógrada que hay. Seas de derecha o de izquierda. Y el Juanra tiene derecho a recordar lo que quiera de Uruguay, y lo envidio porque vive en uno de los países más avanzados del mundo, un país que puso de ministra de Defensa a una joven embarazada de ¡8 meses! A ver si alguno de los jovatos del gobierno de Vázquez que se atribuyen ser la causa (perdón, no puedo contener la risa) de que ALGUNOS uruguayos tengan qué meterse en el cuerpo, cederián su trono a una mujer de 30 y pocos a punto de parir. Y por las dudas advierto: lo mío no viene de la derecha, viene de la izquierda.

Anónimo dijo...

Este tio es un gilipollas. Seguro que es un niño de papa y mama. Menos mal que por suerte no vive en Uruguay. Saludos Verónica

Adrián Singer dijo...

Sería bueno que quien se da el gusto de insultar no se ocultara tras un anónimo. Y si sos vos, Verónica, habrías puesto una coma entre "saludos" y tu nombre, puesto que como está ahora parece que alguien está saludando a Verónica (tal vez sea así, no lo sé).

Bueno, mejor aun sería que el moderador de los comentarios se encargara de hacer lo que hay que hacer cuando un comentarista insulta a otro. ;)

Unknown dijo...

Vamos a ver... ontono tienes razón en lo siguiente: hay que moderar. Pero es que apenas he tenido tiempo para entrar a mirar el blog. Lo que os pido son comentarios acerca de lo que os guste, puede ser sobre la vida del albatros o de las ranas minués. Pero por favor, no os insulteis. La vida es una sola y meter caña en un lugar de estos es como correr en un coche de fórmula 1 con las ruedas de Pedro Picapiedra, es decir, no conduce a nada.

Anónimo dijo...

Estimado Ontono, definitivamente mi comentario no estaba bajo el nombre de anónimo.
De hecho tras el comentario que le hice a Juanra, sería muy estúpido esconderme.
Te cuento que mi comentario no fue ni de derecha ni de izquierda. Ni siquiera quizo ir por él lado de la política.
Te cuento,porque obviamente tu no tienes porque saberlo, que mucho de los momentos que Juanra vivió en Uruguay los compartió conmigo, y de eso iba el mail. De hacerlo ver que la cosa no era tan negativa como pintaba.Incluso ya lo hablé con él directamente.
Por otro lado, sé desde donde lo escribió Juanra, porque su memoria de grado, de la cual conservo un ejemplar en mi casa, es sobre las colonias de uruguayos en madrid. El sabe bien de lo que habla...hay muchos de los nuestros que se fueron dolidos con el país y con razón.Tengo familia en España y se de lo que hablas.
Además conocí España, también de la mano de Juanra, y sé a que te refieres cuando me hablas del lugar en donde vive.
Mi único error (o el más notorio) fue escribir desde el corazón en un blog de política, porque una vez más te aclaro, no hablaba ni de derecha ni de izquierda. Hablaba como quien recorre su ciudad y hoy por hoy,(y gracias a Dios, al gobierno o a quien sea) nota menos hambre y más caras felices.
Saludos
Verónica

Anónimo dijo...

pa!!! vero no se de que pais hablas muchacha. salir con la familia a donde?? en que barrio vivis? te asaltan en cualquier calle , hay que encerrarse despues de las 7 de la tarde, en los ultimos 5 años el consumo de pasta base se quintuplico (datos oficiales).